26 ago 2013

Caracas, te quiero.

La semana pasada estuve en Caracas, el plan era un viaje de dos días para diligenciar en la capital que se convirtió en una semana entera de diversión. Caminé en esos días más de lo que he caminado el resto del año, me enamoré en el metrobus más veces de las que recuerdo y comí más froyo del que merezco.

Mi objetivo principal era la bendita visa, después de aguantar sol, hambre y lluvia el "aprobada" que dijo ese gringo me sonó a gloria, lo que vino después fueron más momentos de alegría. Mojitos gigantes, centros comerciales, Traki de siete pisos, birras en los chinos, metro y más metro, ministerios, mis amores caraqueños, regueton viejo y solera verde fueron las premisas para una excelente semana.


Plaza Altamira



Metro de Caracas



Desde parque del este
Un anillo más


Tuve que ir al centro de la ciudad pensando que sería un caos, más equivocada no podía estar, sí, muchísima gente y todos apurados pero me gustó mucho, aproveché y tomé algunas foticos.











En definitiva, fue un buen comienzo de lo que será mi último mes en el país, por ahora.



Teatro Nacional

McKlopedia en vivo

6 ago 2013

Hablemos de...





Últimamente me siento bombardeada en cuanta red social tengo de “marcas” superfluas que hacen su quince y ultimo a punta de vender artículos a un costo que está muy alejado de su valor. Por ejemplo, puedo contarles que hay una marca valenciana que vende a precios exagerados cintillos hechos con una tira de encaje pegada a una goma elástica de pantaleta, es absurdo, pero lo que encuentro increíble es: primero hay personas que están dispuestos a comprarlos y segundo, se sienten feliz con su compra, es ese el poder que tiene una etiqueta linda y las fotos que subió la marca a instagram de bloggers usando el cintillo. Cada quien tiene derecho a tener su rebusque, algunos venden su cupo cadivi otros hacen cintillos, mi punto es que yo no los compraría porque para mí no valen lo que cuestan.

He notado que con el cuento de talento nacional y hecho a mano nos meten el bowe, por eso hace ya
  bastante tiempo trato de no ir a esos mercaditos de “diseño”, al menos en Barquisimeto, casi todos los stand tienen lo mismo, a precios ilógicos y calidad media, hay excepciones por supuesto (siempre las hay) pero hoy ando en una de criticar. Sin hablar de masas y yéndonos a lo que me gusta llamar la farándula alternativa esto esta muy pero muy relacionado con el eterno amiguismo que hay en Venezuela, no sólo en la política eh? es una cosa loca, un día vez una marca/blogger/dj/diseñador en todos lados, te preguntas, ¿cómo pasó esto tan de repente? y sas, es el resultado de esfuerzo, dedicación, talento y amiguismo.

Desde que empecé a comprar todo yo, con el dinero producto de mi sudor estoy más consciente de la diferencia entre valor y costo, tenemos que el costo según lo define la RAE es la “Cantidad que se da o se paga por algo”y el valor, la RAE lo define como “Grado de utilidad o aptitud de las cosas, para satisfacer las necesidades o proporcionar bienestar o deleite”. ¿Se aprecia la gran diferencia no? es obvia, pero a veces la pasamos por alto. El valor es subjetivo, puede que yo en mi obtusa mente no entienda que para alguien sea una necesidad y le de plena satisfacción comprar el cintillito (uso el cintillo ya que traje el ejemplo a la mesa)  así como alguien tal vez no pueda entender que yo compre anillos así me queden grandes y termine no usándolos.

Por otro lado, relacionado con el tema pero hablando en masas, en mi país la uniformidad es extrema, no he vivido en otros países así que no sé si esto es común y  no estoy muy segura de quien marca la pauta (imagino que la industria, comerciantes y distribuidores) pero a veces tengo la sensación de que alguien va gritándole qué hacer a la gente “Todas a usar headbands, todas con sus carteras furla, todas con collar de búho  todos con camisa columbia” no es una moda normal de temporada como decir que este verano se está llevando el blanco y negro, NO, es una obsesión, hasta el punto que vas en un bus por la calle y ves a buhoneros con todo en versión pirata, tienditas que ahora venden sólo eso, vas a un evento o a comer helado y 3 de 4 personas cargan su uniforme, es desproporcionado. Al mes la fiebre pasó, el buhonero se reinventó y miles de mujeres se quedaron con su collar de búho en una gaveta, tristemente. 





No me malinterpreten, estoy a favor de lo nuestro, pero sobre todo a favor de las cosas bien hechas, que tengan coherencia en la relación costo/valor, sinceramente más de una vez he caído en el juego de comprar una prenda de mala calidad en una tienda cara por el rush del momento, pero nunca por querer sentir que formo parte del conglomerado de gente que está usándola. 

Y esto es un breve resumen de mi punto de vista acerca de la idiosincrasia del venezolano a la hora de comprar moda. 

Espero escribir más, hace años amaba escribir y deje de hacerlo y ya ni recuerdo las razones, espero ser constante y que Hablemos de... se convierta en una sección del blog.

Comentarios????



Cel.

1 ago 2013

Meanwhile... fiesta de gatos

Ya estamos en agosto y estos días se me han pasado demasiado rápido, cuando por el contrario quiero que se me pasen lento, para tener suficiente tiempo de disfrutar y hacer muchas cosas.

Por ahora estoy tratando de pasar este tiempo con las personas que quiero, lo que el trabajo me permite, porque yo soy la versión moderna de la esclava Isaura, no exagero, se los prometo. Menos mal que eso termina este mes.

Estas fotos son en la fiesta de cumpleaños de Amanda y mi mejor amigo, para mi fue épica desde el momento en que llegamos, una combinación de cocuy, excesos, betas, piscina, una vista increíble, chupetas, frío, ron con chinotto, sólo gente buena vaina y un bonito amanecer. Mejor cumpleaños no pudieron pedir, además la música estuvo excelente hasta el final, creo que paré de bailar sólo algunos momentos en toda la noche y nada mas para hacer cosas mejores.



La vista



Lo que use fue un crop top blanco, que ahora es mi básico preferido, la falda me la hice hace ya tiempo y amo locamente ese estampado, la infaltable chaqueta de jean y mis 
nike run free son el color de todo.








Cortesía de WTF ART




Mi cumpleañera




Cel.